Noche de Halloween de 2012, ha llegado el otoño, hemos
cambiado la hora, la noche gana terreno al día. El frio, poco a poco, va
abriéndose pase entre los últimos rescoldos del calor. Hace mucho tiempo ya que
escribí mi anterior entrada y desde luego, no pretendía que esto hubiera sido
así. La pereza, la desidia, y un ánimo oscuro y frio son, en parte,
responsables de ello.
Vivimos en una sociedad triste, deprimente, gris y en la que
no hay un solo día en el que no escuchemos noticias negativas en todos los
aspectos de la vida. Parece que los cuervos que nos gobiernan, que nos informan
y que nos dirigen quieren mantener nuestra alma helada.
Esto, antes o después, hace mella en nuestra alma, nos
derrota y nos hunde en una sima ciclópea de desesperación y oscuridad de la que
no vemos salida posible. Nos enfadamos, nos desesperamos, nos abatimos pero nada conseguimos con ello y finalmente,
un día sombrío, el frío hálito de la desesperanza y de la depresión anida en
nuestros corazones y entonces es cuando, el sistema, nos ha derrotado convirtiéndonos
en estatuas de piedra sin alma y sin esperanza.
Quien este leyendo esto sin duda se pregunta qué tiene que
ver todo esto con el blog. La respuesta es sencilla y evidente a la vez, el
blog de Marius el Alkimista se traiciono a sí mismo, se convirtió en terreno quemado,
yermo y en la prueba evidente de la derrota.
Una vez reconocida la derrota en una batalla, que no en la
guerra, y la asumes como tal, no te queda más remedio que pasar un periodo de
reflexión y de análisis interior. Entonces muchas cuestiones vienen a la mente
y uno se replantea casi todo y se cuestiona aquellas cosas que antes eran como
dogmas de fe.
Una vez pasado este periodo no hay más remedio que elegir
entre dos caminos igualmente difíciles, rendirse y morir o renacer y presentar batalla
sabiendo que es muy posible e incluso seguro que volveremos a ser derrotados
una vez más.
Al escoger el segundo camino la derrota se transforma en
renacimiento y en oportunidad. La esperanza renace y la enorme fuerza del
cambio viene con ella. Entonces nos planteamos que hacer y ahí es cuando unas
sabias deben resonar en nuestras cabezas:
"No pretendamos
que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor
bendición que puede sucederle a las personas y países, porque la crisis trae
progresos, la creatividad nace de la angustia como el día de la noche oscura.
Es de la crisis que nacen la inventiva, los descubrimientos y las grandes
estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar superado.
Quien atribuye la crisis a sus fracasos y penurias, violenta su propio talento
y respeta más los problemas que las soluciones, la verdadera crisis es la
crisis de la incompetencia. El inconveniente de las personas y los países es la
pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin la crisis no hay desafíos,
sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay
méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis
todo viento es caricia.
Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el
conformismo. En vez de esto, trabajemos nuestro talento y nuestras habilidades
para encontrar soluciones, acabemos de una sola vez con la única crisis
amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla. (Albert
Einstein)”.
Hoy renace el blog, hoy vuelve para ser mejor y para ello
cambiara e intentara parecerse un poco más a lo que estaba destinado a
convertirse. Un blog con el que evadirse y que se convierta en armadura y
escudo contra la negatividad y el derrotismo que nos rodea y que amenaza con
destruir la esencia de lo que deberíamos ser.
Que estas palabras no se pierdan en el tiempo como lagrimas
en la lluvia.
Sinceramente vuestro, El Alkimista